El arte de vanguardia se prolonga desde
el Museo Reina Sofia de Madrid hasta la calle Santa Isabel nº 33,
allí aparece Eka & Moor Art Gallery, un espacio de encuentro
para la creatividad.
Desde el mes de Marzo del 2012 sus
directores han realizado una atractiva y variopinta andadura ,
siempre dentro de los márgenes de la mas absoluta actualidad.
Cabe destacar firmas como Álex
Alemany, en cuyas obras de linea rigurosa y volumen preciso que
desembocan en un sutil estudio de calidades, aparece un eco
surrealista que hacer permanecer al espectador tenso e interrogante .
En la exposición “Eros en el
arte”sugerentes anatomías recogen cánones clásicos estilizados
“a la maniera greca”.
La fuerza del expresionismo
abstracto de Aurora Valero llega como una explosión a la sala y en
“Los libros de artista”se asoman retazos de la intimidad escrita,
pintada o grabada de sus creadores.
Tere Usain ofrece su versatilidad
tanto en su autorretrato de lápiz sobre papel, tan minucioso como si
de un grabador flamenco se tratara, como en sus paisajes de resinas
sobre aluminio de rápida pincelada y calidades sorprendentes.
Paisajes también rotundos los de
Marisa Ebri, que capta fragmentos de la naturaleza con sus
gesticulaciones cromáticas así como los de Mª Luisa Valero que
estremecen por la fuerza rugosa de sus empastes.
Abstracciones de movimientos planos
son los Desirée Fuertes y largos trazos orientalizantes emergen de
las telas de Marian López Plana.
Recorrido incompleto es el aquí
realizado para citar algunos pintores de la galería pero no podría
finalizarse esta crónica sin hablar de los dos artistas que han
hecho posible esta experiencia Pilar Sagarra y Vicente Heca, creadores
de su propia obra, creadores de este sugerente espacio.
Cuando se observa la obra de Pilar
Sagarra es como si “el azul oscuro casi negro” que hoy nos rodea
se esfumase y una explosión de optimismo coloreado irrumpiese en
nuestro interior. Sonrisa y pasión despiertan sus objetos y sus
cuadros, creadora osada, que conoce el fauvismo y a veces
compartimenta espacios a la manera cubista,que domina la perspectiva
clásica en ocasiones conscientemente invertida y que mueve su muñeca
ante el soporte con sorprendente agilidad visceral.
Vicente Heca lleva en su larga
andadura artística el misterio y la sugerencia dentro de sus
pinceles. Es sabido que el hiperrealismo debe comportar virtuosismo
técnico, y este se manifiestan sobradamente en la obra de Vicente,
pero su pintura va mas allá. El primer impacto visual produce
sugerencias infinitas: pliegues de finas telas, rayas de seda,
canicas, piedras...lo son en efecto,pero muchas sensaciones se
asoman tras ellas . Artista polifacético, logra que en todas sus
obras esté presente su propio yo que es el mismo que se trasluce al
apenas cruzar las primeras palabras con el.
En sus creaciones forma- técnica
dominada- y fondo- comunicación con el espectador- se aúnan
armónicamente.
Feliz andadura, bienvenida sea la
cultura y el arte de la mano de estos dos creadores que iluminan una
calle de Madrid que desemboca en la cuna del arte de vanguardia.
Marisa Sanz
Historiadora de Arte